Increíble. El Cajasol, colista hasta la fecha, acudió a Vistalegre con el cuchillo entre los dientes y aniquiló a un Real Madrid que ya había jugado con fuego en su anterior envite liguero en casa, ante el CB Granada (81-80). Los blancos empezaron mejor y disfrutaron del impactante Felipe Reyes (22 puntos, 14 rebotes y 34 de valoración) pero nunca pudieron frenar el valiente ataque cajista.
Así, Pecile guió a los de Comas en una feroz oposición convertida al final en una trepidante lucha contra el tiempo. Bullock reaccionó a tiempo para forzar la prórroga con dos tiros libres y anotar ocho puntos seguidos que daban a los suyos ventaja (107-106) en el tiempo extra, pero al Real Madrid se le agotó la pólvora y el Cajasol, con Savanovic, Ilic, Rivero o Miso a un nivel primoroso, acabó triunfando donde nadie se lo esperaba. Gesta y dosis de tranquilidad para un equipo hispalense que encara su jornada de descanso sin Bennett y en puestos de descenso, pero con una bien ganada sonrisa.
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